Relacionados con la factoría de salazones estarían dos hornos de cerámica que, aunque con distinta tipología datan del siglo I d.C. De los hornos sólo se conserva la parte inferior, correspondiente a la caldera. Estos hornos producían ánforas para envasar los salazones que aquí se producían y que se transportaban a todas partes del imperio.
La ubicación de los mismos, así como su tipología nos proporciona mucha información acerca de la civilización romana.
La ubicación nos da una idea de donde se encontraba la zona “industrial” y lo que era el centro neurálgico de la antigua ciudad de Caviclum. El centro neurálgico se encontraba bajo lo que hoy día son los bloques de la urbanización “Centro Internacional Bauhoffman”.
Aunque los dos hornos son de la misma época, presentan una tipología diferente y por ello una manera de producir piezas cerámicas de diferente forma. El más antiguo presenta un sistema escalonado aprovechando el perímetro circular del mismo y el segundo es menor en volumen pero mayor en altura y con un sistema de galerías laterales que permite albergar un número mayor de piezas para su cocción.